La Memoria de un proyecto un nexo de unión entre todos los documentos básicos.
En la memoria se justificarán las soluciones adoptadas y,
conjuntamente con los planos y pliego de condiciones, deberán describir de
forma unívoca el objeto del proyecto.
Este documento básico deberá estar claramente comprensible,
no sólo por profesionales y especialistas, sino por terceros, en particular por
el cliente, especialmente en los que se refiere a los objetivos del proyecto,
las alternativas estudiadas, sus ventajas e inconvenientes, y las razones que
han conducido a la solución elegida.
Contenido de la memoria.
En una primera hoja figurará:
§
El título del proyecto y su código
identificador. En el caso en que el objeto del proyecto contemple un
emplazamiento geográfico concreto, se definirá dicho emplazamiento y, si
procede, sus coordenadas UTM.
§
Razón social de la persona física o jurídica que
ha encargado el proyecto y su CIF, nombre y apellidos de su representante legal
y su DNI, dirección profesional, teléfono, fax, correo electrónico y cualquier
otro identificador profesional que pueda aparecer o existir, salvo aquellos
cuya publicidad no sea legalmente procedente.
§
Nombre y apellidos, titulación, colegio al que
pertenece, número de colegiado, DNI, dirección profesional, teléfono, fax,
correo electrónico y cualquier otro identificador profesional que pueda
aparecer o existir, salvo aquellos cuya publicidad no sea legalmente
procedente, de cada uno de los autores del proyecto, y de los responsables de
su verificación, revisión y validación.
§
Razón social de la entidad o persona jurídica
que ha recibido el encargo de elaborar el proyecto, así como su CIF, dirección,
teléfono, fax, correo electrónico y cualquier otro identificador profesional
que pueda aparecer o existir, salvo aquellos cuya publicidad no sea legalmente
procedente.
§
Fecha y firma de los anteriormente mencionados.
Y previo a comenzar a describir los distintos puntos de la
memoria, se realizará un índice que hará referencia a cada uno de los
documentos, capítulos o apartados, que componen la memoria, con el fin de
facilitar su localización y utilización.
Una memoria, en general, contará con los siguientes
capítulos:
Objeto.
Se identificará el proyecto y su justificación.
Alcance.
Se indicará el ámbito de aplicación del proyecto.
Antecedentes.
Se enumerarán todos aquellos aspectos necesarios para la
compresión de las alternativas estudiadas, y la solución final adoptada.
Reglamentación y Normas de referencia
aplicadas.
Se relacionarán los documentos citados en los distintos
apartados de la misma.
Disposiciones legales y normas aplicadas.
Leyes, reglamentos, ordenanzas, etc. y normas tanto de
obligado como de no obligado cumplimento que se han tenido en cuenta en la redacción
del proyecto. También se citarán los documentos de ayuda y reconocidos para la
aplicación de las distintas reglamentaciones que se han tenido en cuenta.
Bibliografía.
Resto de documentación técnica que el autor considere de
interés para justificar las soluciones adoptadas en el proyecto: libros,
revistas, o textos de índole técnico.
Programas de cálculo.
Relación de programas, modelos u otras herramientas
utilizadas para desarrollar diversos cálculos del proyecto.
En el caso de programas de cálculo se indicará el nombre del
mismo y la versión utilizada en el proyecto.
Plan de gestión de la calidad aplicado
durante la redacción del proyecto.
Se detallarán los procesos específicos utilizados para
asegurar la calidad durante la realización del proyecto.
Otras referencias.
Incluiremos aquellas referencias, que no estando
relacionadas en los apartados anteriores se consideren de interés para la
compresión y futura materialización del proyecto.
Definiciones y abreviaturas.
Se relacionarán todas las definiciones y abreviaturas que se
utilizarán en la redacción del proyecto. En cualquier caso la primera vez que
se utilice una abreviatura se incluirá el término completo con la indicación
“en adelante”, y la abreviatura que se utilizará en otros puntos posteriores.
Requisitos del diseño.
Describiremos las bases y datos de partida establecidos por:
- § El cliente, y,
- § Los que derivan de:
- § La legislación, reglamentación y normativa aplicables.
- § El emplazamiento, y su entorno socio-económico y ambiental.
- § Los estudios realizados encaminados a la definición de la solución adoptada.
- § Las interferencias con otras instalaciones, o elementos externos al proyecto, y en general cualquiera que condicione la solución técnica adoptada en el proyecto.
Indicaremos las distintas alternativas estudiadas, y qué
caminos se han seguido para llegar a ellas, ventajas e inconvenientes de cada
una y cuál es la solución finalmente adoptada y su justificación.
Resultados finales
Descripción del producto, obra, servicio o instalación según
la solución elegida, indicando cuáles son sus características definitorias y
haciendo referencia a los planos y otros elementos del proyecto que definen
esta solución adoptada.
Planificación.
Definiremos las etapas, metas, o hitos a alcanzar, plazos de
entrega y cronogramas o planificación de los trabajos.
Orden de
prioridad entre los documentos básicos.
El proyecto no debe contener elementos contradictorios, pero
para evitar posibles discrepancias se deberá establecer una prioridad entre los
diferentes documentos básicos que lo componen.
Como se ha mencionado en el artículo sobre consideraciones generales a la hora de redactar un proyecto técnico, si no se especifica
otro orden, la UNE 157.001 establece el siguiente orden de prioridad:
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